El principal problema que aguarda tras esta negociación es la figura de Daniel Levy, el hombre fuerte del club inglés en la parte ejecutiva. Cuando el conjunto nervionense trató el regreso de Fazio en el mercado estival, en los dos últimos días tras la lesión de Carriço -al final contrató a Andreolli, ahora también lesionado-, se encontró con un Tottenham que jugó sus cartas para que el argentino no regresara a Nervión. Cuando todo estaba acordado con el Sevilla se le puso encima de la mesa una oferta del WBA inglés, que Fazio rechazó.
