Tal fue el rendimiento de Vitolo el año pasado, que durante todo el verano hubo miedo a que algún equipo depositara el dinero de su cláusula. No fue así y Vitolo comenzó la temporada como sevillista, pero no lo pudo hacer en la misma línea de buen juego. Ni estaba tan rápido ni era tan determinante, pero poco a poco el Vitolo actual recuerda más al del pasado. El canario va a más una vez que se han resuelto ciertos problemas familiares relacionados con sus hijos. Veremos si con esta progresión no tenemos un verano movido con el jugador sevillista.