«Me dio mucha pena irme de allí como me fui por los compañeros y la afición, que me querían mucho. Al final, intenté hacerlo bien como lo habían hecho jugadores como Iborra o Coke… Pero alguien no quería que saliera de la mejor manera y a pesar de que la afición del Sevilla ahora no me quiera, siempre les agradeceré todo el cariño que me dieron son una gran afición».
