Uno de los grandes objetivos de Unai Emery desde su llegada al banquilo del Sevilla ha sido dotar al equipo del armazón defensivo necesario para poder hacer bueno el fútbol de ataque que predica el técnico de Hondarribia. Sin embargo, los planes, y muy especialmente esta temporada, la primera que Unai comienza al frente del plantel, han caído en saco roto por el momento. La muestra más clara de ellos es que el Sevilla es el segundo conjunto más goleado del Campeonato Nacional de Liga: nada menos que 26 tantos (dos de media por encuentro, cifra altísima) y sólo en una ocasión logró mantener su portería a cero.