Por primera vez, el Sevilla lucirá en una de las mangas de sus camisetas una escarapela que lo confirma como el monarca del torneo. Ahí, para que todos los sevillistas se sientan orgullosos de lo conseguido por los suyos en los mandatos de José María del Nido y José Castro, para darle a cada uno los méritos que se ganaron, habrá una reproducción del trofeo, lo que algunos llamaron peyorativamente “paragüero” y otros, caso del CSKA de Moscú, reprodujeron con la cabeza erguida en una de las torres de su moderno estadio. Y junto a esa copa tan preciada aparecerá un número que es bastante significativo, un cinco, 5 si lo prefieren con cifra, que atestigua el número de veces que el capitán del Sevilla, ahora los más petulantes lo llaman Sevilla Fútbol Club al recitar el nombre completo, levantó ese trofeo como campeón de la competición.