La calma que reina en el Sevilla es sorprendente. Pero, ¿y si el equipo no gana Huesca? Sin duda, la figura de Pablo Machín saldría torpedeada. Y es que es casi imposible mantener a un entrenador que ha dejado de ganar. La Europa League, una vez más, está sirviendo de colchón al entrenador y a Caparrós, cuya planificación está cada día más cuestionada. Mientras tanto, el técnico se limita a decir que “seguimos en puestos de privilegio”. En Huesca habrá en juego más que tres puntos…