La base del sistema de Montella es el 4-3-3, con laterales muy altos desde el inicio del partido. Las alas son muy importantes para el italiano, ya que les concede un punto de partida incluso superior al centro del campo. Es lo que ha empleado en su etapa en el Milan, la más reciente antes de aterrizar en Heliópolis. Montella quiere que sus equipos traten bien el balón desde atrás, respetando la salida del esférico por fases y escalonadamente y no sin cierto riesgo.