La llegada de este prometedor bosnio causa cierta extrañeza. No por su nivel, que ya veremos cuál es, sino por la demarcación que ocupa. Stevanovic jugará dónde le digan, pero sobre todo se desenvuelve por la derecha, el territorio de Navas. ¿Para qué reforzar lo único fiable del equipo? Cabe la posiblidad de que la venta que se haya a puesto a tiro sea la del propio Jesús Navas y el club haya cerrado antes un recambio. Aunque cosas más raras se han visto en el fútbol, no es fácil que salga el de Los Palacios. Sería culminar la más improbable de todas las salidas y también la más dolorosa. Esta temporada no rinde a su nivel habitual, pero Navas sigue siendo mucho Navas en el Sevilla.