La entidad lazial se niega a poner un precio oficial a su futbolista, esperando a que llegue una propuesta en firme por parte del Sevilla FC (o de cualquier otro equipo) y, a partir de ahí, empezar a negociar al alza. Una postura beligerante que no facilita nada los contactos, por lo que todo está en este momento en manos de los clubes, prefiriendo mantenerse el futbolista al margen, al considerar que por ahora sería demasiado precipitado entrar en escena, algo que, con el mercado más avanzado y las posturas más próximas, no es descartable que se produzca. Transfermarkt refleja un valor en 28 millones de euros, unas cifras que Monchi no está dispuesto a alcanzar bajo ningún concepto.