A dos semanas del cierre de mercado, todo sigue igual y sin visos de cambiar nada, a no ser que en Nervión asuman por fin que con Ganso les tocará perder. Una cesión con opción de compra afrontando el Sevilla la mayor parte de su ficha, rescindirlo o guardarse algún tipo de porcentaje de un futuro movimiento son hoy por hoy las únicas soluciones que se le presentan a Caparrós, que en esta recta final afronta el reto de conseguir que el negocio con Ganso sea lo menos perjudicial posible para los intereses económicos del club de Nervión.