La Quiniela ha cambiado la vida de miles de españoles desde su nacimiento oficial (22-9-1946). Pero no solo la de los acertantes de premios millonarios, también la de ciudadanos que nunca rellenaron un boleto. Porque este juego, administrado en sus primeros años por el Patronato de Apuestas Mutuas Deportivo-Benéficas, contribuyó a la construcción y el equipamiento de edificios tan emblemáticos como el hospital Gregorio Marañón de Madrid. También ayudó a financiar eventos deportivos de trascendencia internacional como el Mundial de fútbol de España 82 o los Juegos de Barcelona.