Por la cabeza de ningún sevillista pasa que se pueda dar el milagro, pues bastará un empate del Valencia o del Getafe para dejar al Sevilla fuera de la Champions. En el fútbol puede pasar de todo, pero la sensación general en el entorno del club y en la afición es que la temporada se le ha hecho muy larga al Sevilla. La principal diferencia con otras temporadas de más de 60 encuentros oficiales es la calidad física de la plantilla, que además estaban más compensadas para poder rotar entre competiciones, algo que esta temporada ha pasado factura a Pablo Machín con un grupo de futbolistas que ha sufrido multitud de problemas físicos, con todo tipo de lesiones. Sólo Emery y Juande, con plantillas compensadas y de más calidad física, sacaron un alto rendimiento con más partidos.