Rubiales llegó a decir la madrugada de ayer en El Larguero que es “muy probable” que el título se juegue a partido único el día 12 y en un campo neutral (por descartes, la vía más factible vuelve a ser el Wanda). Reveló que los presidentes están de acuerdo y que para ello tiene que haber “una compensación económica tanto a la propia Federación, que pierde un partido televisado y parte de la taquilla, como también a los clubes”, que pierden la taquilla y obligan a sus aficiones a desplazarse. Estas declaraciones de Rubiales tuvieron su efecto inmediatamente en las redes sociales, donde sevillistas le recordaban a su club que la Supercopa se había vendido como parte del abono total de la temporada 18-19. Seguidamente, fuentes del Sevilla anunciaban a Efe que sólo accedería a la vía del partido único si el encuentro se disputaba en el Sánchez-Pizjuán para no molestar a sus aficionados.