Frédéric Oumar Kanouté se hartó de meter goles con la camiseta del Sevilla, muchos con la derecha o con la testa, alguno con la izquierda. Y en Nyon, con un impecable traje negro, marcó un último gol para su equipo del alma, esta vez con la mano, en el sorteo de los dieciseisavos de final de la Liga Europa. La séptima bola que extrajo el franco-malí del bombo de cabezas de serie fue la del Sevilla, que se vio emparejado con el CFR 1907 Cluj, de Rumanía. La ida será el 20 de febrero en Transilvania, a las 18:55 horas, y la vuelta una semana después en el Ramón Sánchez-Pizjuán (21:00). Aunque se trata del vigente campeón de la liga rumana, pudo ser bastante peor para los intereses sevillistas. Algo más de dos meses tiene el preparador vasco por delante para que su equipo afronte en óptimas condiciones una eliminatoria con un peligro sordo.