El intercambio entre mediocentros, el brasileño más fuerte que el canario, que es lo que buscaba Lopetegui para la alta presión que quiere instalar en el Sevilla, se llevará a cabo sin más compensaciones económicas de por medio. El valor en el mercado de ambos futbolistas es similar. Roque Mesa, apuesta de Joaquín Caparrós, que hizo efectiva la opción de compra por él al Swansea el pasado verano a pesar de no haber contado apenas para Montella el año anterior, tiene dos años de contrato aún y el coste de amortizar su fichaje aún se elevaba a cuatro de los seis millones que pagaron por él. Es decir, más o menos la cantidad que el Galatasaray está pidiendo por Fernando. El hecho de que a los turcos se le pueda solucionar la marcha de un jugador con otro con margen de crecimiento como Roque Mesa terminó por acercar posturas.
