Es otra final más. No una más. Eso nunca. En el Sevilla, desde el presidente hasta el último empleado, saben lo que se ha trabajado para poder disputar su octava final europea en una década. José Castro lleva desde diciembre de 2013 en el cargo (aterrizó en el club en el 97) y se presenta ante su cuarta cita importante en el viejo continente. Todo ha ido muy rápido para este empresario de 56 años desde que accediera a la presidencia. El equipo va rodado. Ahora sólo necesita poner un poco de paz accionarial para que los éxitos sigan llegando a este ritmo.