El Sevilla llamado a generar ilusión ha perdido alarmantemente en intensidad y carácter, lo que minimiza su capacidad para competir. Krychowiak es quien más sufre este déficit.

El Sevilla llamado a generar ilusión ha perdido alarmantemente en intensidad y carácter, lo que minimiza su capacidad para competir. Krychowiak es quien más sufre este déficit.