Llegaba Unai Emery a la sala de prensa del Vicente Calderón y lo hacía satisfecho con el resultado obtenido. “Con el 1-1, cuando lo teníamos controlado, la pena es no haberlo mantenido el resultado o incluso haber ido a por ellos. Pero el 2-1 hay que darlo como un buen resultado por las circunstancias de después y de antes”, comenzaba el técnico.