El debut de Gael Kakuta ante el Levante fue uno de los más extraños que se recuerdan últimamente en el Sevilla. El extremo se acercó a la banda y los técnicos entendieron que pedía el cambio de botas. Sin embargo, el francés se marchó directamente a los vestuarios, ante el enfado monumental de Carcedo y la sorpresa de Martagón y los utilleros, que no entendían nada.