El punto logrado no esconde el mal partido del Sevilla en tierras checas. 90 minutos para olvidar que dejan tocado a su entrenador. “El punto es bueno porque seguimos líderes. Por juego hemos merecido ganar tras un buen primer tiempo, con posesión, llegada… aunque el 1-0 al descanso era injusto. En el segundo es verdad que nos faltó continuidad, pero seguíamos dominando. Hay que estar satisfechos porque el punto es bueno. Queríamos ganar, pero no hemos podido. Seguimos dando pasos adelantes. Estos siete puntos ahora hay que refrendarlos en casa”, decía Unai Emery, publicitando una versión de lo sucedido muy distinta a la vista por la mayoría.