La mente del mediocentro se cortocircuitó lo justo para que el árbitro lo expulsara por insultar. Y ahí se acabó el Sevilla. Tener a Banega en tu equipo trae algunas veces esta consecuencia. El 10 será hoy de la partida. Picado consigo mismo, pedirá perdón a su manera. Con la pelota en sus pies y guiando al Sevilla a jugar la Champions.
Ver Noticia[ad id=»88331″]