El presidente José María del Nido no da puntada sin hilo. Su discurso es el mejor termómetro de la afición sevillista y varía según la situación. En esta semana, el mandatario ha pasado de la crítica ácida a la imagen ofrecida en el Vicente Calderón, tildándola de «lamentable y desastrosa», a recuperar la línea ambiciosa al asegurar que «nuestro Sevilla volverá a ser de Champions».