El gran triunfo del Sevilla en el siglo XXI es sufrir una grave crisis con el equipo quinto en la Liga, clasificado para los octavos de final de la Champions League y de la Copa del Rey, con un superávit económico millonario y con 40.000 socios a precios más lógicos para noruegos que para sevillanos. Y esta es la situación actual del club de Nervión, que se dispone a pegar un volantazo a mitad de la primera temporada pos-Monchi. La apuesta de Óscar Arias por Eduardo Berizzo para dirigir a esta plantilla ha fracasado y no quiere José Castro esperar a que el daño sea mayor.