La primera jornada de Ciro Immobile en La Manga fue tan intensa como satisfactoria para el ariete italiano, que comenzó a funcionar a primera hora de la mañana junto a sus nuevos compañeros. Ya dejó claro en su presentación que una de las barreras que más temía era la del idioma, pero en la práctica, ayer esa circunstancia no supuso ninguna traba para el delantero.