Después de la buena victoria del Sevilla frente al Schalke 04, los de Matías Almeyda tendrán que viajar a tierras francesas para jugar un amistoso ante un equipo Champions, el Olympique de Marsella.
Lo cierto es que las sensaciones están siendo cada vez mejores. El entrenador argentino está dando con la tecla y está recuperando a ciertos jugadores que estaban completamente defenestrados.
Por ejemplo, Akor Adams, que con el argentino ha visto puerta por primera vez desde que está en el Sevilla, marcando dos goles en el último amistoso. También hizo un gol Iheanacho, Marcao parece un futbolista algo más útil, Idumbo es un cañón por la banda izquierda…
Además, le está dando una seña de identidad, los futbolistas presionan mucho en el campo rival, y eso provoca errores del contrario, como por ejemplo contra el Schalke, en el segundo gol de Akor Adams.
Además, Guido Bonini, el preparador físico, está mejorando de forma sustancial la resistencia y la fuerza de los jugadores de la plantilla, hemos visto una mejora en ese aspecto que es clave en el fútbol actual.
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Todo esto se hace mientras que Antonio Cordón intenta buscar soluciones para esos descartes que hay que colocar, también trabajando en una posible gran venta que permita a varios profesionales ser inscritos en la Liga.
Por lo tanto, a falta de refuerzos en el Sevilla confían en el buen hacer del nuevo cuerpo técnico para dar un nuevo aire fresco al vestuario sevillista.