El Sevilla FC deberá vender a alguno de sus grandes activos este verano para cuadrar las cuentas y amortizar la pronta eliminación en Champions.
El nombre señalado era el de Koundé. Las tentativas en años anteriores de City y Chelsea, así como el propio deseo del jugador, lo ponen en el escaparate para ser la gran venta del mercado estival.
Sin embargo, la temporada del francés no está al nivel de la del año anterior. Las tres expulsiones sufridas con el Sevilla y su selección, unido a las lesiones y que parece jugar con el freno de mano, pueden haber dismuniuido su valor de cara a una futura venta.
Es por ello que el club se plantee un cambio de estrategia y el jugador por el que mayor rendimiento pueda sacar en el mercado sea Diego Carlos. El brasileño está haciendo una campaña excepcional y sus 29 años y con la Premier acechando, aconsejan que puede ser la marcha que menos daño haga a su posible amortización.
Con esto, Koundé vería frustada su salida por tercer año consecutivo, aunque con el hándicap de quedarle sólo dos años de contrato y que cada vez tenga la sartén por su mango.