Para que llegase Nasri al Sevilla se debía dar una circunstancia ineludible. Decíamos ayer en estas páginas que para fichar al francés debía salir Yevhen Konoplyanka. Y tal hecho sucedió. El ucraniano se marcha al Schalke 04 con la ya clásica fórmula de estos tiempos de la cesión con opción a compra obligatoria, que sirve para que los controles financieros de la UEFA no impidan operaciones entre clubes en un momento determinado y para cuadrar los años fiscales. El conjunto de Gelsenkinchen tendrá que abonar, uniendo las cantidades fijas y las variables, un global de 15 millones de euros.
