Un fracaso sin paliativos requiere un cambio radical y eso anunció José María del Nido durante su larga comparecencia para hacer balance y presentar un nuevo proyecto «a tres años». Sin embargo, y pese a atacar duramente el rendimiento de un plantilla «supravalorada», defendió en líneas generales la labor de Monchi, del que rechazó su renuncia al cargo de consejero, según explicó, así como le dio continuidad a su puesto profesional de subdirector general en materia deportiva. «Por unanimidad del consejo», aclaró.