Cedido hasta el próximo 30 de junio, Sirigu tratará de recuperar su mejor nivel. Algo en lo que confía plenamente su excompañero Ezequiel Lavezzi, que analiza para MARCA al penúltimo fichaje sevillista para la 2016-17: «Salvatore es un portero que suma tanto dentro como fuera de la cancha. Sabe leer muy bien los códigos que hay en los vestuarios, y el trabajo es una de sus principales características».
