«Carlos vivió una etapa muy bonita en Sevilla, tanto a nivel personal como deportivo. Su familia estaba muy contenta allí, tanto su mujer como sus hijos; y, a nivel deportivo, le fue muy bien y vivió dos años muy buenos. ¡Cómo no se va a acordar de Sevilla! Para él, la ciudad, el club y la afición son especiales», cuenta a ESTADIO Sergio Barila, el agente que posibilitó su llegada a la Serie A.