En el calendario religioso y sentimental de Sevilla, los días de la semana que entra ya tienen nombre. El Domingo de Pasión visita el Ramón Sánchez-Pizjuán el Villarreal, y el Jueves de Pasión lo hará el Basilea. Se presenta una semana que hará honor a su nombre en el nomenclátor católico y Nervión tendrá que revestirse de sus mejores galas para ayudar a un equipo que no zanjó en Suiza su estigma viajero. Al menos, esta vez no perdió y además, por momentos, trasladó una buena imagen, algo ficticia, pero no desagradable a la vista.
