Nadie daba un duro por la continuidad del madrileño una vez que acabara la temporada por lo enquistada de una negocación que comenzó en verano y que sigue sin cerrarse. Historias de desencuentros entre el club y su representante, rumores de marcha a la Real Sociedad primero y al fútbol chino después… Su continuidad era una quimera, pero esta situación cambia radicalmente con la llegada de Monchi. Principalmente porque Monchi fue su principal valedor cuando Sarabia llegó al Sevilla en verano de 2016 y porque el director deportivo sabe tocar ciertos resortes en la negociación que van más allá de los años de contrato, la cláusula de rescisión o el sueldo del jugador.
