En la primera entrevista que concedió a este diario, Maduro se mostró convencido de que con su llegada al Sevilla recuperaría el sitio perdido en la selección holandesa pues estaba seguro de que gozaría en Nervión del protagonismo que le faltó en el Valencia. Pero con el paso de los partidos, la realidad del mediocentro tornó en una muy distinta a la esperada, y poco a poco fue cayendo del once titular hasta convertirse en un habitual del banquillo nervionense a la sombra de Medel y Kondogbia.