Monchi sigue siendo una figura respetada por el Sevillismo, pero no endiosada como aficionados de otros equipos pretenden hacernos creer, porque ellos sí son de subir dioses rápidamente, para luego bajarlos a los infiernos.
En el Sevilla, si hay ue darle palos a Monchi, se le da, independientemente de reconocerle de que todo lo conseguido en estos años, tiene en el de San Fernando a su principal ‘culpable’.
Por ello, no hay problema en reconocer que el Director Deportivo sevillista, ha cometido tres grandes errores en los últimos meses.
En primer lugar, mantener a Lopetegui en el mes de Mayo. El equipo iba en cuesta abajo desde enero y, aunque se salvo, la plaza de Champions, se veía que su proyecto estaba acabado. El motivo lo desconocemos, pero se decidió mantener al técnico vasco.
En segundo lugar, una planificación deportiva desastrosa. Sabiendo que tenía que desprenderse de Diego Carlos y Koundé, no se firmó a jugadores libres con valía que estaban en el mercado y se apostó por futbolistas lesionados, sin ritmo de competición o demasiado jóvenes.
Por último, el empecimiento en seguir con Lopetegui a toda costa. No hizo caso a los dirigente y mantuvo al vasco a pesar de que el equipo estaba caído. Quizás el sentirse culpable por el segundo error, motivó en querer aguantar lo que ya era inaguantable.