El mes de noviembre, además del mes de los difuntos y de un universal y legendario sevillano como Don Juan Tenorio, el burlador que impetró clemencia a los cielos en el camposanto hispalense tras una vida disoluta, ha terminado por ganar fama para el Real Madrid, que lo que hace habitualmente es perder, de convertirse en tiempo gafe, de brujas y malos mengues cuando visita en la Liga al Sevilla F. C. Sencillamente por eso: porque casi siempre palma en Nervión.
