En el Sevilla esperan conseguir una cantidad que ronde los 35 millones euros y que el galo perdonara entre cuatro y cinco millones de euros, una cifra que por contrato deberían percibir Nzonzi y su padre. Y es que en el Sevilla todavía se valora con fuerza tener un comportamiento inflexible. Sería la primera vez que el club dejara a un futbolista sentado en la grada si una oferta decente no llega a las oficinas del Sánchez-Pizjuán.
