Con prácticamente media temporada disputada, es el momento de sacar conclusiones sobre el cambio realizado en la dirección deportiva del Sevilla. Oscar Arias y su equipo realizaron el pasado verano un total de nueve incorporaciones. De todas ellas, solo Éver Banega es titular indiscutible en el equipo por méritos propios. Otros dos fichajes son titulares circunstancialmente: Kjaer, titular siempre desde las lesiones de Pareja y Carriço, y Pizarro, quien se ha convertido en indispensable en el once hispalense debido a la espantada de N’Zonzi, pero que hasta entonces perdía en la competencia con el francés por un puesto en el mediocampo. El resto de incorporaciones, como el Guadiana: aparecen y desaparecen de las alineaciones. La realidad es que el Sevilla juega prácticamente con los mismos jugadores de la temporada pasada, tan solo reforzados por Banega y, puntualmente, Pizarro y Kjaer.