Cuando el Real Madrid se decidió a romper la hucha para fichar a Illarramendi, el Sevilla entendió que por esa parte Kondogbia estaba un poco más cerca de quedarse al menos un año en Sevilla. Pero no es así. Por un lado, el padre del jugador entiende que su niño está para grandes retos, y empuja a Doyen, el grupo inversor que posee el 50% de los derechos económicos del futbolista, a que escuche a clubes como Chelsea y Real Madrid, entre otros. Por otro lado, Zidane, crecido por el acierto de Varane, piensa que el todavía jugador del Sevilla va a ser la bomba en los próximos años y que firmarlo ahora por unos quince millones de euros sería una ganga.