Esto tiene un claro riesgo, ya que se pueden mezclar sevillistas e ingleses en la grada y, como todo en la vida, no sabes si el que se sienta a tu lado es alguien cabal, o un descerebrado.

Esto tiene un claro riesgo, ya que se pueden mezclar sevillistas e ingleses en la grada y, como todo en la vida, no sabes si el que se sienta a tu lado es alguien cabal, o un descerebrado.