Anthony Martial abandonó el terreno de juego en el partido de este domingo contra el Espanyol por una dolencia en la parte posterior del muslo. El jugador hacía un gesto claro a los médicos como si se tratara de un pequeño pinchazo.
A falta de pruebas y de oficialidad, desde Radio Marca han confirmado que se trata de una lesión muscular que lo tendría apartado de los terrenos de juego entre 6 y 7 días, por lo que llegaría muy justo para el derbi.
Conociendo el secretismo y como se juegan las cartas en este tipo de partidos, no sería de extrañar que se estuvieran mandando señales de que el jugador estuviera apartado, para dar la sorpresa el domingo al Sánchez-Pizjuán.