La convocatoria para un partido de Primera División supone para Israel Puerto (El Viso del Alcor, 15-06-93) un doble triunfo. Si siempre para un canterano es un éxito que el entrenador del primer equipo reclame sus servicios para un partido oficial, en el caso de este espigado central tiene un valor añadido, pues hace dos años estuvo a punto de dejar el fútbol al entrar en una pesadilla que al final tuvo un final feliz.