Samir Nasri (29 años) es una de las grandes sensaciones de esta primera mitad de LaLiga Santander. Tras casi un año sin jugar por culpa de las lesiones, Nasri llegó con muescas de dolor al Sevilla y ganas enormes de reivindicar su gran talento. El francés agarró el timón del equipo de Sampaoli y asegura que no anda dispuesto a soltarlo. Se subió al barco sevillista y volvió a sonreír. Samir se siente querido y valorado en el pentacampeón europeo, quiere quedarse y el Sevilla hace números. 25 millones tienen la palabra.