El Sevilla FC-Alavés estuvo marcado por un agente externo, el calor sofocante que protagonizó todo el encuentro. Los más de 30 grados que marcaban los termómetros en Sevilla a las 16.15 hicieron del encuentro de LaLiga Santander una cita para valientes, y un partido de riesgo para los jugadores. De hecho, no sabemos si por motivo directo del calor, lo cierto es que se lesionaron cuatro jugadores, dos del Alavés y dos del Sevilla FC, además del árbitro Mateu Lahoz.
