El futbolista de River Plate tiene una oferta encima de la mesa, aunque supeditada a que arregle su condición de comunitario. En Argentina asumen su marcha, se resignan a que la llamada de Sampaoli es irrechazable, mientras que su agente trata de solucionar el tema de su pasaporte. Estos trámites burocráticos son los que trata de acelerar su representante, con un plazo fijado, esta semana. Mientras, el Sevilla trabaja en otras opciones.