Empezó y sigue siendo un baluarte del Sevilla, aunque quizás su musculosa figura se haya venido algo abajo por los tres penaltis cometidos en la Europa League -su chilena dio origen a la consecución del título, ojo- y por la irrupción de un Koundé que ahora mismo acapara todos los elogios del mundo futbolístico. Sea como fuere, es una bendición que se quede. Cosas del mercado. Probablemente no llegue al nivel de Koundé, pero recordemos que en muchos momentos de la pasada temporada fue más de medio Sevilla. «Estoy aquí, no he salido, hay que seguir con el Sevilla y pensar en las competiciones que tenemos por delante. Me quedan muchos años de contrato. No he estado con la cabeza metida en el mercado. Pienso en el Sevilla, que es lo más importante para mí».
