«Por mi forma de ser, y por el cargo que ostento, jamás puedo estar de acuerdo con ese ruido de sables. Respeto todas las opiniones, pero mi obligación es buscar soluciones para conseguir que todos los sevillistas que sean accionistas estemos en el mismo barco, también los no accionistas». Castro incluso tiende la mano a Del Nido, recordándole que los intereses del Sevilla FC «están por encima de las personas». «Me gustaría que hubiera sensatez, estamos a las puertas de la Supercopa de Europa, en Champions la próxima temporada, acabamos de conseguir un nuevo título con lo difícil que es, y reitero que lo que debe haber es cordura entre los sevillistas. Le tiendo la mano a todos los sevillistas, también a José María del Nido Benavente, que es sevillista, así me lo exige mi responsabilidad como presidente. El nuestro es un proyecto ganador y seguro que vamos a sacar adelante la junta».