O se busca la vida en calidad de cedido por otras latitudes o se gana la confianza de Pablo Machín. No le quedan más opciones a Carlos Fernández. Y es que no tendría mucho sentido que un futbolista que debutara de manera oficial en el primer equipo en Copa del Rey ante el Racing de Santander en Nervión, en la temporada 2013/14, volviera a formar parte del filial en la 2018/19 a sus 22 años. Sobre todo, militando los ahora entrenados por Luci en Segunda B.