Para muchos, la contratación de Matías Almeyda como nuevo entrenador del Sevilla, es una apuesta tremendamente arriesgada del director de fútbol, Antonio Cordón.
Principalmente, porque no ha entrenado en la Liga, aunque si estuvo como jugador. También porque en el Sevilla se han hecho experimentos muy extraños en los últimos años, que sin duda han provocado que el banquillo del club nervionense esté muy concurrido.
Aún así el director deportivo extremeño está convencido de que va a salir bien, es un perfil que necesita el equipo, que trabaja mucho en lo mental y sobre todo en lo físico.
De hecho, como bien han contado en Zona Mixta, la plantilla está encantada con este inicio del ex del AEK de Atenas, y es que consideran que esta forma de entrenar, les va a dar mucho más fondo físico y van a poder mejorar en un aspecto que en otros tiempos no ha sido organizado de forma adecuada.
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La pasada temporada con García Pimienta, varios jugadores y pesos pesados importantes del vestuario, se quejaron al entrenador barcelonés, por la falta de intensidad en los entrenamientos.
Esto provocó entre otras cosas, el conflicto entre Suso y el ex de la Unión Deportiva Las Palmas.
