El Goliat inglés ha dinamitado el mercado de fichajes con el respaldo de su dueño desde 2002, el jeque Mansour bin Zayed Al-Nahyan. Con un gasto en fichajes en este mercado veraniego de cerca de 200 millones de euros deja casi en calderilla lo que el David sevillista ha invertido en sus diez contrataciones: unos 34 millones de euros.
