El Sevilla estaba compitiendo en el Metropolitano, hasta que Nianzou salió al campo y cometió un penalti estúpido, confirmando que si el francés está en el campo, el resultado está en riesgo.
Es cierto que ese penalti fue claro, pero resulta curioso destacar un dato, que evidencia que los arbitrajes que está recibiendo el Sevilla esta campaña, están siendo excesivamente duros.
Y es que sin ser un equipo violento, es el conjunto más tarjeteado y con más penaltis en contra de toda Europa, siendo el más castigado disciplinariamente de todas las ligas europeas.
Destacar que esto viene por diversos motivos. Evidentemente la falta de calidad que hay en defensa influye, ya que centrales como Marcao y Nianzou, transmiten muy poca tranquilidad.
A todo esto se le suma también la pérdida de respeto de los colegiados a un club que está descabezado y que no tiene ningún tipo de fuerza institucional.
En tres partidos diferentes, sus contrarios, marcaron el primer gol del partido, después de haber cometido el Sevilla un penalti, para posteriormente acabar ganando el encuentro.
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Hay también una desproporción elevada entre las faltas que hacen los de Matías Almeyda y las tarjetas que recibe. No es ni mucho menos el equipo que más faltas comete, pero si es de largo el que más cartulinas recibe…
